Afirmar que las legumbres engordan es falso, ya que nos pueden ayudar a adelgazar. Además, son uno de los alimentos más saludables que existen.
El problema no reside en las legumbres, sino en los alimentos con los que las acompañamos, como el chorizo o la panceta. Las legumbres solo contienen un 3% de grasa y son ricas en hidratos de carbono.
Es obligatorio consumir legumbres en cualquier dieta equilibrada. También aportan proteínas, fibra y micronutrientes.
Las personas diabéticas pueden tomar legumbres porque los hidratos de carbono que presenta son de absorción lenta y liberan la glucosa en sangre de forma gradual evitando picos de glucemia.
Con un plato de lentejas o alubias blancas comerás menos, porque las legumbres generan una sensación de saciedad mayor que otros alimentos.
Si no sabes cuántas veces a la semana tienes que comer alubias o garbanzos. Los nutricionistas aconsejan tomar raciones de legumbres de entre 60 y 80 gramos tres veces por semana.
«Son aptas para cualquier persona, incluidas las que tienen el colesterol alto, ya que aportan ácidos grasos saludables, y también para los celiacos porque no contienen gluten», dice la nutricionista María Sánchez Maroto.
A la hora de cocinarlas puedes recurrir a recetas más saludables, es decir, eliminando las morcillas, pancetas y chorizos.
Los expertos aconsejan aumentar el consumo de legumbres porque reduce los niveles de colesterol malo. Las legumbres también son muy recomendables para las embarazadas, ya que son ricas en ácido fólico.
Este nutriente interviene en el desarrollo correcto del feto a nivel neuronal y previene malformaciones. Es muy importante que la gestante consuma verduras de hojas verdes, frutos secos y legumbres.
También aportan proteínas y energía, por eso son muy buenas para deportistas. «Aún así, en el reciente estudio Anibes, representativo de la población española, el consumo medio total de legumbres se establece en 13,5 gramos/persona/día, y se observa un mayor consumo en personas mayores frente a los grupos más jóvenes», explican desde el periódico digital Okdiario.
Este verano puedes preparar con las legumbres recetas muy saludables como cremas, ensaladas o incluso hamburguesas.
«Los medallones de falafel al horno, por ejemplo, son una forma muy buena de incorporar las legumbres a la dieta. Su combinación con salsas bajas en calorías nos dará unos sabores diferentes a los que estamos acostumbrados», afirma la nutricionista.
En las legumbres de bote se observa una reducción de fibra, calcio, hierro y potasio. «Siempre es mejor utilizar legumbres secas, basta con acordarnos de ponerlas en remojo el día anterior a su cocción. Estaremos ganando en nutrientes y reduciendo el consumo de sal, que puede dificultar la pérdida de peso», comenta Sánchez Maroto.
Lo ideal es acompañar estas legumbres con cereales, como se ha hecho tradicionalmente con las alubias con arroz.
Si visitas Huesca puedes probar el plato Recao de Binéfar. Nosotros decidimos probarlo y nos encantó este guiso a base de alubias blancas, aderezadas con aceite, pimentón, cebolla picada, pimienta y ajo. Al final de la cocción, se añaden trozos de patata.
Después de probar este plato tradicional es aconsejable realizar deporte para eliminar calorías y evitar el estrés.
Como puede ser la Tirolina Ordesa Pirineos, ya que durante el recorrido puedes disfrutar de las vistas privilegiadas al Parque de Ordesa y Monte Perdido de Aragón en familia o con amigos.
Esta disciplina cada vez gana más adeptos, porque aporta muchos beneficios y te permite estar conectado con la naturaleza. Las ventajas de practicar deporte al aire libre son: aumenta la producción de endorfinas, mejora la salud cardiovascular, reduce el estrés, descarga tensiones de los músculos, etc.
También te encantará realizar senderismo con tus hijos. Practicar este deporte reduce los niveles de cortisol y fomenta el respeto por el medio ambiente.
Te aconsejamos practicar senderismo en familia porque fortalece los vínculos afectivos. Con esta actividad los más pequeños mejoran la salud, fortalecen los músculos, queman calorías, reducen los niveles de colesterol, mejoran el sistema inmunitario, descansan mejor, etc.
Aprovecha este destino para ir a pescar con los niños. Varios estudios han descubierto que las personas que apuestan por esta actividad tienen mejor salud, mejor sueño y comen más pescado.
Además, la pesca relaja y estás en contacto con la naturaleza. Los pequeños conocerán las especies que están en peligro de extinción y la pesca responsable.
Para que los menores no se aburran es aconsejable que participen, por lo que pueden ayudar a recoger el hilo de la caña y también pueden elegir el sitio.
Aunque si tus hijos son muy pequeños, es mejor ir a un río o un lago tranquilo. Evita que se asomen demasiado al agua y es aconsejable que estén alejados de corrientes.