¿Qué es el autismo y cómo explicarle a mi hijo/a que lo tiene?

El autismo se explica fácilmente. En este artículo, la psiquiatra Raquel Calles Marbán, nos explica de forma sencilla y comprensible qué es el autismo, qué formas existen y cómo surge el término “trastorno del espectro autista”. Si tu hijo/a lo tiene, a cierta edad pueden surgirle dudas y puede que te pregunte. Entonces, la profesional nos indica también cómo explicárselo.

¿Qué es el autismo?

Ante todo, el autismo no es una enfermedad, sino más bien, un trastorno del desarrollo. El cerebro de una persona autista no reconoce correctamente la información o la percibe de forma diferente. Las personas autistas ven el mundo con otros ojos. Tienen una percepción diferente a la de las personas no autistas. Por ejemplo, se escuchan ruidos como el de un cortacésped o algo similar mucho más fuerte. Esto muchas veces les asusta.

Formas de autismo

A menudo se conocen las tres formas diferentes: “autismo de la primera infancia”, “síndrome de Asperger” y “ autismo atípico”. Hoy en día todo se resume bajo el término “trastorno del espectro autista”, o “ TEA” para abreviar. El autismo es un espectro, lo que significa que las personas autistas son muy diferentes entre sí, y no todos tienen los mismos síntomas y grados. Algunos no pueden hablar en absoluto, otros incluso hablan muy temprano y muy bien.

El autismo en la primera infancia ahora se conoce como la forma grave del trastorno del espectro autista. Esta forma aparece en la primera infancia. Los bebés afectados suelen mirar menos a sus padres o no mirarlos en absoluto.

El síndrome de Asperger, la forma leve del trastorno del espectro autista, a menudo sólo se manifiesta más tarde. Los niños afectados suelen ser solitarios y tienen grandes dificultades para hacer amigos o incluso no quieren hacerlo.

Características del autismo

Las personas autistas no pueden reconocer muy bien las emociones de otras personas. Por ejemplo, no reconocen cuando alguien está triste y no pueden empatizar con otras personas. Escuchan a alguien decir algo, pero no entienden lo que dice. A menudo sólo entienden determinadas palabras. Por eso no pueden hacer nada con sentencias largas. Las personas autistas tampoco pueden entender cuando alguien dice algo “por diversión”. Lo toman literalmente y no entienden el humor que hay detrás, es decir, ausencia total de entendimiento de la ironía. Algunas personas con TEA no pueden hablar o empiezan a hablar tarde. Pero también hay personas con TEA que pueden hablar muy bien.

Las personas con TEA suelen realizar movimientos inusuales que se repiten una y otra vez. Esto podría ser, por ejemplo, agitar las manos y los brazos, balancear la parte superior del cuerpo, mover los ojos, correr en círculos, tirarse al suelo, darse golpecitos en el estómago o algo similar. Este tipo de comportamientos también se denominan comportamientos estereotipados.

Los afectados también suelen tener intereses especiales. Podría ser, por ejemplo, un objeto con el que pasan mucho tiempo. A menudo disfrutan de los juguetes y objetos que hacen música, hacen ruidos o parpadean. Pero también puede ser un interés especial por algún tema como guías telefónicas, números, horarios de autobuses, dinosaurios, etc.

Las personas autistas necesitan una rutina diaria muy regular. Tienen dificultades para afrontar el cambio, los asustan. Puede ser que comas todos los días a la misma hora o que el lugar en la mesa tenga que ser siempre el mismo. A menudo tiene que ser el mismo plato azul en el que comen. Les gustan mucho los rituales y las estructuras fijas. Eso les da seguridad.

Causas del autismo

Se cree que el TEA podría tener diferentes causas.

  • ¿El autismo es hereditario? Se estima que el autismo es hereditario entre un 70 y un 80 por ciento.
  • ¿El autismo es congénito? Dado que el autismo sólo se puede diagnosticar a partir de los dos años aproximadamente, muchos padres afectados suponen que su hijo se había desarrollado previamente de forma completamente «normal» y que este trastorno sólo se desarrolló de repente. Sin embargo, se supone que el cerebro de las personas autistas se desarrolla de forma diferente en el útero. Por tanto, el autismo sería congénito.
  • ¿Autismo a través de la vacunación? Algunos padres sospechan que su hijo sólo se volvió autista después de la vacuna triple vírica (paperas, sarampión y rubeola). Sin embargo, esto ha sido refutado varias veces por varios estudios.

Conclusión:

Hasta el momento no hay resultados vinculantes. Sin embargo, sugiere que varios factores podrían influir como causa. Los factores biológicos y los factores orgánicos del cerebro se consideran la causa principal.

¿Se puede curar el autismo? No. El autismo no es curable, pero sí tratable.

Autismo explicado para niños

¿Cómo le explicas a tu hijo que su hermano o él mismo tiene un trastorno del espectro autista? ¿Y cómo pueden los profesores explicar a sus alumnos por qué un compañero de clase parece completamente “normal” y, sin embargo, a veces se comporta “de manera diferente”? Explicar características como el comportamiento estereotipado y las dificultades de comunicación de una manera adaptada a los niños no es tan fácil y requiere mucha empatía. Una explicación, dependiendo de la edad y el nivel de desarrollo de los niños, podría ser la siguiente:

Los niños con autismo tienen percepciones diferentes. Esto significa que pueden ver diferente, oír diferente, oler diferente con la nariz, saborear diferente y sentir diferente que otros niños. Por ejemplo, oyes un cortacésped mucho más fuerte y ves muchas más cosas en una habitación al mismo tiempo. Puedes imaginarlo así: cuando estamos en una feria donde hay muchos carruseles, puestos, luces y gente, es muy ruidoso y confuso para nosotros. Los niños con autismo suelen tener esto en la cabeza. Eso a veces les asusta.

Como todos los niños, los niños con autismo son muy diferentes entre sí. Algunos niños con autismo no pueden hablar. Si quieren decirnos algo, lo hacen sin palabras. Luego, por ejemplo, nos cogen de la mano y la llevan hasta el juguete que quieren. Pero también hay niños con autismo que hablan muy bien.

Lo entienden mejor cuando les decimos lo que queremos de ellos en frases muy cortas. No entienden frases largas (aunque hay niños que tiene una amplia conversación)

Los niños con autismo prefieren jugar solos. Están felices cuando pueden jugar solos. No puedes reconocer muy bien cuando otras personas están tristes, felices o asustadas. Sin embargo, hay niños con autismo que disfrutan jugando con sus amigos y haciendo amistades nuevas, aunque cada cierto tiempo quieran estar un rato a solas.

A veces agitan las manos, se dan palmaditas en el estómago, se revuelcan en el suelo o caminan en círculos. Hacen estos movimientos una y otra vez.

Los niños con autismo a menudo encuentran realmente genial un juguete en particular. Luego juegan con él durante mucho tiempo y lo miran de cerca. Pueden ser juguetes que hagan música, ruidos o destellos. A veces también les resulta emocionante consultar una guía telefónica.

A los niños con autismo les gusta mucho saber exactamente lo que sucede durante el día. No les gusta si la rutina cambia. Eso les asusta. Puede ser que coman todos los días a la misma hora o que quieran sentarse siempre en el mismo lugar. También hay niños que siempre quieren comer del mismo plato o con los mismos cubiertos. Sin embargo, un evento o salida al parque de atracciones que llevan deseándolo hace tiempo, pueden hacer una excepción como algo emocionante (aunque puedan requerir su casa y su cama al final del día).

Si tu hijo/a tiene autismo y ya hace preguntas acerca de ciertas diferencias que él mismo nota en comparación con sus amigos o compañeros de clase, que suele ser a partir de los 9 hasta los 14 años, es importante que no se lo escondas y que se lo expliques de la forma más sutil y que él pueda comprenderlo. Dale importancia a la diversidad (tan presente en su colegio en cuanto a razas, religiones, discapacidades, etc.), y señálale que es algo muy común y que no debe sentirse mal por tener autismo, sino que es muy especial por tener el poder de tener una percepción que otros no tienen. Pide ayuda a tu psiquiatra o psicopedagogo del colegio para darle esta explicación y que el niño resuelva sus dudas.