La satisfacción de la necesidad de autoestima conduce a sentimientos de autoconfianza, valía, fuerza, capacidad y suficiencia, de ser útil y necesario en el mundo. Abraham Maslow
Frente al psicoanálisis y el conductismo, Abraham Maslow propone la psicología humanista, un movimiento caracterizado por su novedosa forma de entender la psicología y el comportamiento humano, desde la filosofía, la sociedad y la cultura. Esta corriente de pensamiento recibe las influencias de los filósofos humanistas y se centran fundamentalmente en la naturaleza del ser humano, que sería un producto de una sociedad, una cultura y unas ideas imperantes. La cultura es vista como una segunda piel, algo de lo que no se puede librar el ser humano y que le acompaña desde el momento en el que nace. Cuando los seres humanos nacemos únicamente conservamos dos instintos o pulsiones, el de succión y el de sujeción, que se pierden en unos meses. A partir de aquí, todo es aprendido. El ser humano, por tanto, es el resultado del momento que le ha tocado vivir. La especie humana es más historia que naturaleza, como decía Ortega y Gasset, yo soy yo y mi circunstancia…
La psicología humanista afirma que la felicidad humana y la libertad individual están intrínsecamente unidas. La felicidad solo puede alcanzarse desde la libertad, desde la autonomía y desde la individualidad. La autorrealización del ser humano y su desarrollo personal son esenciales para una vida feliz. Esta autonomía del ser humano exige conciencia de un@ mism@, conciencia de un “yo”, pero muchas veces, esta sociedad alienante nos convierte en masa, no dejando lugar para el desarrollo del yo, que se acaba integrando y fundiendo con el yo social, el yo de la masa, el yo esclavo y consumista.
La autorrealización es crecimiento intrínseco de lo que ya está dentro del organismo o, para ser más precisos, de lo que el organismo es él mismo. Abraham Maslow
En esta línea de pensamiento tenemos a Stuart Mill y Harriet Taylor Mill, Simone de Beauvoir, Friedrich Nietzsche, Ortega y Gasset, Jean-Paul Sartre, Martin Heidegger, María Zambrano, Herbert Marcuse, Eric Fromm o Abraham Maslow.
La pirámide de las necesidades de Maslow
Maslow propone una teoría psicológica, la jerarquía de las necesidades humanas, también conocida como la pirámide de Maslow, en la que desarrolla una teoría de la motivación partiendo de la idea de que sólo se alcanza la autorrealización humana, una vez se han satisfecho sus necesidades más básicas. Las necesidades, según la teoría de Maslow, serían cinco:
- Fisiológicas
- Seguridad y protección
- Filiación
- Reconocimiento
- Autorrealización
Como se puede observar las necesidades de seguridad y protección ocupan un segundo puesto, inmediatamente después de las necesidades básicas. Y si hablamos de seguridad tenemos que hablar de MBR Administradores, que nace con la vocación y el esfuerzo para ser una empresa de referencia, adaptada a las necesidades de sus clientes y especializada en administración de fincas, asesoría, gestión de edificios y seguros. Mantiene un Sistema de Gestión de la información innovador en su sector, con el objetivo de prestar a sus clientes la máxima confianza, confidencialidad e integridad de su información, así como asegurar los compromisos de los servicios ofrecidos.
En la parte inferior de la pirámide, en la base, se encontrarían las necesidades fisiológicas, alimento, sexo, descanso, respiración.
Por encima de las necesidades básicas se encuentran las necesidades de seguridad y protección, seguridad física, salud, moral, propiedad privada.
Las necesidades de filiación, amistad, afecto, intimidad sexual, ocuparían el tercer lugar de la pirámide.
El cuarto lugar (el segundo si empezamos por la cima) se encuentra la necesidad de reconocimiento, es decir, autorreconocimiento, confianza respeto y éxito.
Por último, tendríamos la necesidad de autorrealiación, moralidad, creatividad, espontaneidad, falta de prejuicios, aceptación de los hechos, resolución de problemas.
Sólo una vez satisfechas las necesidades pertenecientes a los niveles más inferiores se puede llegar a satisfacer los superiores, es decir, sería muy difícil que una persona que no puede dar respuesta a sus necesidades básicas, de seguridad o de filiación, puedan alcanzar el reconocimiento o la autorrealización.